miércoles, 16 de mayo de 2012

RECORDANDO A MARIA MONTEZ EN SU CENTENARIO



 Nació en Barahona, República Dominicana, hija de Isidoro Gracia García, español, y Regla Teresa María Vidal, oriunda de Baní, el día 6 de Junio de 1912. Llamada María África por su padre en homenaje a su tierra natal, la Isla de la Palma, en Islas Canarias, España, localizada al frente del continente africano.
 

Su verdadero nombre era entonces MARÍA ÁFRICA GRACIA VIDAL. Sin embargo, su nombre aparece entre sus biógrafos en las siguientes formas:
 

María Africa Vidal de Santos Silas

María Africa Vidal de Santos Siles y Gracia

María Antonia Vidal de Santos Silas y Gracia

Africa María Gracia Vidal

María Gracia Van Dahi de Santos Siles MacFeeters

María Van Dahi de Santo Sillas y Gracia

María América Gracia Vidal de Sto. Silas

María Teresa Vidal de Santo Silas y Gracia

María Teresa de Santo Silas Salomons

María Africa Antonia Gracia Vidal de Santo Silas

María Theresa Gracia de Santo Sillas
 

Su padre se dedicaba a la exportación de madera, específicamente de guayacán, y también a la venta de tejidos. Tuvo el título de Vicecónsul Honorario de España. María fue la segunda hija de una prole de diez (Isidoro, Aquilino, Joaquín, David, Ada, Consuelo, Luz, Luis, Jaime y Teresita). Desde muy pequeña mostró inclinación por el cine y se esmeró en el aprendizaje del idioma inglés, que estudió escuchando canciones y leyendo revistas norteamericanas. Estudió hasta el octavo grado.
 

Sus vecinos de Barahona comentaban que de pequeña, en vez de jugar a las muñecas, creaba su propio escenario tendiendo una gran sábana blanca de una pared a otra de su casa, que era tenuemente iluminada con una lámpara de gas.
 

Contrajo matrimonio dos veces. La primera en su pueblo natal con el banquero irlandés William McFeeters, el 28 de noviembre de 1932, que era el representante en Barahona del First National City Bank of New York y con quien estuvo casada casi siete años, hasta su partida a Nueva York, el 3 de julio de 1939, tenía 27 años y no 19, como dicen algunos libros de cine.
 

Su primer trabajo en New York fue posar para la portada de una revista por la suma de US$50. Posó para cuadros de McCleland Bracly, famoso pintor neoyorkino, que la conoció a través de la prensa. Siguió una repentina avalancha de ilustradores, fotógrafos y agencias de modelaje. El éxito alcanzado es sólo relativo. La primera en reconocerlo es ella misma.
 

En el Restaurant 21 conoció a George Schaeffer, importante ejecutivo de la RKO Radio Pictures. Cuando el empresario le preguntó si aceptaría someterse a unas pruebas de cine, ella exclamó: ¡Películas! ¿Qué daño pueden hacerme?


Pero fue Joe Pasternark, directivo de la Universal, rival de la RKO, quien tuvo la pericia de adivinar el potencial en Montez y le hizo una oferta razonable: un sueldo de US$150 semanales, el pago del viaje a Hollywood y otras prestaciones.
 


En una de sus travesuras, que utilizaba para llamar la atención, comentó a la prensa que aceptó la oferta de trabajo de la Universal porque esta empresa carecía de estrellas glamorosas. En aquel momento, la Universal contaba con estrellas como Marlene Dietrich y Loretta Young.
 

Cuando María arribó a Hollywood, no permitió que el lujo de sus ambientes deslumbraran sus sentidos, por el contrario, tuvo la valentía de afirmar: Si Hollywood es la ciudad del espectáculo, yo ofreceré el mío. María eligió el apellido Montez en honor a una famosa bailarina aventurera llamada Lola Montez, pensó que acoplaría muy bien con su personalidad y con su primer nombre de pila.
 

La primera película en que aparece brevemente, como una beldad que se exhibe en traje de baño en un concurso de belleza, es LUCKY DEVILS (Malvados con suerte), en 1941. Aunque fue favorecida con un excelente enfoque (muy de cerca), le fueron asignadas sólo algunas líneas de diálogo trivial. Su nombre fue omitido en el reparto de esta película de clase B, mientras que el de Janet Shaw, con una participación menos importante, si apareció.
 

BOSS OF BULLION CITY (El amo del oeste) es el título de la próxima cinta en que actúa. La suerte parece hallarse de su parte en esa oportunidad que comparte honores estelares con Johnny Mack Brown. Después debe conformarse con una breve participación en un filme de clase B, THE INVISIBLE WOMAN (La mujer invisible), paradójicamente sólo dice una frase.
 

Para compensar este mal momento en la carrera recién comenzada, tiene la insólita idea de fundar su propio club de admiradores el MONTEZ FOR STARDOM CLUB (Club para el estrellato de la Montez) compuesto en gran parte por coleccionistas de fotografías de artistas en poses sensuales y con escasa ropa, que hoy en día sería catalogadas de candorosas.
 


La suerte la acompaña en su siguiente película, THAT NIGHT IN RIO (Aquella noche en Rio), luce esplendorosa por primera vez en tecnicolor. La Universal cede a María a la empresa rival, 20th. Century Fox, para aparecer en una película con Carmen Miranda, Alice Faye y Don Ameche. En este filme, María baila una contagiosa rumba, haciendo destacar los reflejos rojizos de su cabello, probando que se veía maravillosamente bien en colores por primera vez.


En RAIDERS OF THE DESERT (Jinetes del desierto), película que la pone por primera vez, con diáfanos velos y con los magníficos escenarios que intentan llevar a pantalla la magia del Lejano Oriente. En MOONLIGHT IN HAWAII (Claro de luna en Hawaii), los espectadores tendrán que aceptarla en sexta línea como Ilani, la rubia nativa de la Isla Principal.


En 1942, actúa en la primera película del género escapista, SOUTH OF TAHITI (La Reina de la selva o La Venus de la selva). María actúa como la muchacha blanca que vive en una ensoñadora isla del continente asiático. Esto fue ideado por la Universal con la finalidad de competir con la Paramount Pictures, cuyas películas, estelarizadas por la legendaria Dorothy Lamour, en el desierto, en la selva ó en una isla tropical, abarrotaban las salas de espectadores ávidos de escapar de las preocupaciones de la Segunda Guerra Mundial.


Pese al éxito obtenido con la anterior película, María es insertada nuevamente en una película de clasificación B, cuyo título es BOMBAY CLIPPER (El vuelo de Bombay), una intrascendente cinta de espionaje, que no favorece a su carrera. Poco después, María se presenta a los espectadores en la producción: THE MISTERY OF MARIE ROGET (El misterio de Marie Roget), basada en la obra homónima de Edgar Allan Poe.
 

El 1° de octubre de 1942, encontró el amor por segunda vez en la estación ferroviaria de Dearborne. Se enamoró a primera vista del apuesto caballero que, pese a ser alto (6 pies de altura), de tez blanca, ojos azules y pelo rubio, tenía cierto aire que lo diferenciaba del promedio de los norteamericanos. Era el actor francés Jean Pierre Aumont, que estaba contratado por la Metro Goldwin Mayer, para actuar en THE CROSS OF LARRAINE.
 

La boda se realizó el 13 de julio de 1943 en la casa de María. La dama de honor fue Janine Crespin, acompañada del “best man” Charles Boyer, el pintor Frederic Sprague fue el organista que interpretó la marcha nupcial y como invitados de honor estaban su astrólogo, su jardinero y dos masajistas húngaros. En la ceremonia los recién casados se besaron 112 veces. Lamentablemente, para María, Aumont tuvo que partir a la guerra, poco tiempo después.
 


¡Por fin! La Universal descifró la complicada clave de sus encantos, eligiéndola como el centro de la que se perfila como acertada producción para el cine, que llevará el sugerente título de: ARABIAN NIGHTS (Las 1,001 noches). Ambientado en el maravilloso Cercano Oriente, este film, en tecnicolor, ofreció a Montez la oportunidad de vestir el tradicional ropaje oriental. Sus ojos rasgados y sus facciones fueron espléndidamente resaltados por los turbantes, mientras las túnicas, los velos se acoplaron increíblemente bien con su silueta. Esta fue la primera película que coprotagonizó con Jon Hall y Sabú.


LAS MIL Y UNA NOCHES fue la película que inspiró la célebre frase de María: ¡Luzco tan hermosa que contemplar mi imagen me estremece de placer! También marcó el inicio de una popular serie de filmes de tipo escapista, que fueron realizados por la Universal entre 1942 y 1945. WHITE SAVAGE (La salvaje blanca), segunda de esta serie, fue la película que consagró a María como la indiscutible *Reina del Tecnicolor* (Queen of Technicolor).




Para continuar con el tema del Oriente, el Estudio produjo después ALI BABA AND THE FORTY THIEVES (Ali Babá y los 40 ladrones). En los países donde se exhibió la película, las salas de cine fueron colmadas por verdaderas oleadas de público. En 1944 protagonizó COBRA WOMAN (La Reina cobra), una rara historia que tiene lugar en una aldea en que habita una cruel sacerdotisa. Un verdadero reto para ella, porque tiene el doble papel de las hermanas gemelas: Nadja, la tiránica soberana de una tribu de adoradores de serpientes, y de Tollea, la noble y sencilla muchacha.


María consiguió apropiarse del triunfo, a pesar de ser una recién llegada, de haber iniciado su carrera a la edad de 28 años y de que apenas dispuso de tiempo para su preparación cinematográfica, lo cual no le permitió desarrollar facultades de carácter dramático.



La Tempestuosa Montez, la Dinamita dominicana, siempre tuvo un largo séquito de periodistas que la seguían a todas partes, ya que no sólo proporcionaba material para escribir una columna periodística, sino para redactar una página completa de un diario. Cuando no había ninguna novedad entre los miembros de la colonia del cine, los editores de Los Angeles les gritaban a sus reporteros: ¡Vayan a Bervely Hills, a ver qué está haciendo la Montez!; según el periodista Pete Martin del Saturday Evening Post.


En noviembre de 1943 obtuvo dos reconocimientos en República Dominicana, su país. La Orden Juan Pablo Duarte, en el Grado de Oficial, y la Orden Trujillo, en el mismo grado, que le otorgó el dictador Rafael Leonidas Trujillo, cuando se filmaba la película GYPSY WILDCAT (Alma gitana), que le reportó a la Universal millonarias sumas de dinero.


La Universal quería continuar con este tipo de películas, pero Montez no estuvo de acuerdo, no quería ser estereotipada y no se prestaría a que los implacables cineastas la convirtieran en una actriz que sólo podía interpretar determinados roles, siempre acompañada del mismo actor y encasillada en la misma clase de película (ya había actuado en más de 4 películas con Jon Hall).


También en 1944, María Montez fue una de los invitados de la Primera Dama, Eleanor Roosevelt, para el cumpleaños de su esposo, el Presidente Franklin D. Roosevelt, en el Hotel Statlor en Washington, D. C.


Antes de que concluyera 1944, se estrena BOWERY TO BROADWAY (Camino a Broadway), película en blanco y negro que rompe momentáneamente, con la secuencia de sus películas escapistas iniciada en 1942. Ese mismo año fue promocionada como Embajadora de Buena Voluntad de los países latinoamericanos ante los Estados Unidos dentro de la denominada política del buen vecino.


En 1945 únicamente actúa en la película SUDAN (Sudán), que fue la última de sus películas escapistas, las cuales llenaron toda una época en la historia del cine norteamericano de los años cuarenta.



También en 1945 surgen cambios en la vida de la Montez, el primero fue traer desde su pueblo natal de Barahona, a sus hermanos Jaime, Ada, Luz, Consuelo, Teresita y Lucita, quienes intentaron incursionar en el mundo del cine. Y el segundo, cuando Jean Piere Aumont regresó de la guerra en mayo de 1945.


A pesar de que no tuvieron mucho éxito en el cine. Consuelo actuó en PIRATES OF MONTEREY con el seudónimo de Julia Andre y se casó con el publicista de la Universal, Keneth Carter. Luz Montez contrajo matrimonio con el periodista del Paris Match, Jean Roy, cuyo verdadero nombre era Ives L. Leleu. Su hermano Jaime Montez, actuó en las películas TIME OF CUCKOO, MONTSETRRAT, LIVE WIRE, HEAVEN CAN WAIT, BULL FIGHT, ANA LUCASTA y BAD MAN. Unos años después decidió ingresar en el ejército americano, obtuvo el grado de sargento y participó en la guerra de Corea. Teresita llegó a ser contratada como modelo exclusiva de la revista francesa Vogue en los años 50.


María se rehúso a trabajar en la película FRONTIER GAL, estaba cansada de las películas escapistas, por lo cual recibió una sanción de la Universal con una fatal suspensión de su contrato aunque con el atenuante de ser sólo temporal. La película sería entonces protagonizada por la actriz Ivonne de Carlo, que luego sustituye a María en SALOME WHERE SHE DANCED, esta última fue acribillada por la crítica, sin embargo lanzó a De Carlo al estrellato.
 

La película TANGIER (Tangér), fue concebida por la Universal con el propósito de complacer a María. Pese a que una vez más su belleza sobresale, esta cinta en blanco y negro, fue catalogada como el error más grande de toda su carrera, porque permitió que muchas de sus hasta entonces desconocidas limitaciones, salieran a flote.
 

El 14 de febrero de 1946 María dio a luz una hermosa niña que recibió el nombre de María Christina. Hoy en día, conocida como la actriz Tina Aumont (ó Tina Marquand).
 

Mientras filmaban THE EXILE (La caída de un reino ó El desterrado), en 1946, María, demasiado tarde para protestar, se entera de que la promoción sólo mencionará a Douglas Fairbanks Jr. y que ella aparecerá solamente en 20 minutos del filme. La Universal había firmado un contrato para 8 películas en calidad de protagonista, María y sus abogados llevaron el caso a la corte y ganó la demanda de US$250,000.
 

Luego protagoniza nuevamente en tecnicolor la película PIRATES OF MONTEREY (Piratas de Monterey). María toma de improviso la decisión de abandonar para siempre la Universal. Sus directivos no movieron un dedo para evitar el alejamiento de unas de sus actrices más taquilleras.


María Montez, desprovista de obligaciones con Universal, firmará inicialmente con el productor de cine Symour Nebenzal, para realizar la película THE SIREN OF ATLANTIS (La Sirena de la Atlántida o La Atlántida), con United Artits.




Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, María Montez se traslada a París con su esposo Jean-Pierre Aumont. El recibimiento que los franceses tributaron en esta ocasión al actor galo y a su bella esposa, la primera estrella del cine norteamericano que visitaba esta nación después de la guerra, fue muy halagador.


Del 20 de septiembre al 5 de octubre de 1946, María Montez y su esposo fueron invitados al Primer Festival del Cine en Cannes. La primera película que Jean Pierre y María realizaron en Francia fue HANS LE MARINE (Hans el Marino). François Villiers, hermano de Jean Pierre, dirigió el filme. También actuaron en esta ocasión Lilli Palmer y Jean Roy, el esposo de Luz (Lucita) Montez.


La siguiente película de María fue PORTRAIT D’UN ASSASIN (Pasión prohibida), filmada en Francia por Bernard Roland. Importantes actores de Europa como Erich Von Stroheim, Arletty y Pierre Braseur figuran en papeles importantes. Según los críticos María lució más seductora y convincente. Lo que prueba que sus dotes histriónicas comenzaban a madurar.


Luego María viajó a Italia para desempeñar el rol protagónico de la película IL LADRO DI VENEZIA (El ladrón de Venecia). Su actuación fue elogiada en forma unánime por la crítica: No cabe duda; ésta es la mejor actuación de toda su carrera. Durante la filmación de esta película María tuvo una fuerte pelea con Jean Pierre, lo que sorprendió a los medios porque nunca habían despertado comentarios, la pareja era considerada como uno de los matrimonios más sólidos del cine.


La segunda película italiana de Montez fue AMORE E SANGUE (Tierra de violencia). A su regreso a París, María comienza a prepararse para su debut en teatro con la obra L’ILE HEREUSE (La isla feliz), que Jean Pierre escribiera para ella. La obra fue estrenada en enero de 1951 en el teatro Eduardo VII de la Ciudad Luz, María interpretaba el personaje de una actriz hispanoamericana llamada Carlota Goya, que al llegar a Hollywood es víctima de intrigas y ofensas por parte de importantes personalidades del cine. L’ILE HEREUSE fue tan bien acogida en París que después fue montada en otras ciudades europeas.


El actor francés y la actriz dominicana viajan a Italia para compartir la filmación de la película LA VENDETTA DEL CORSARO (La venganza del corsario), en la que ambos volverían a actuar como los principales personajes del filme.


En mayo de 1951, su agente Louis Schurr, le hizo una proposición para regresar a Hollywood, que ella aceptó con agrado, pero lamentablemente no pudo cumplir.


María África Gracia Vidal, falleció el 17 de septiembre de 1951, mientras tomaba un baño, en su residencia de Sureness, París. Sus hermanas Ada y Teresita la encontraron ahogada en la tina del baño. De acuerdo a los médicos, el accidente sufrido por María pudo haber sido provocado por dos causas distintas: Sufrió un paro cardíaco a consecuencia de un shock que el contacto con el agua caliente (45 grados Celsius) le produjo. El calor del agua le provocó un desmayo y a consecuencia de éste se ahogó. No llegó a practicarse la autopsia, por lo que la verdadera razón de su muerte no pudo ser determinada.


El 11 de septiembre de 1951, en la Iglesia Católica Romana de Saint Pierre de Chaillot, se realizó el funeral. Su cadáver fue amortajado con un traje de noche de seda azul con adornos blancos, obra de Jacques Hein, como correspondía a la que en vida fue aclamada como la Reina del Tecnicolor.



En la República Dominicana, causó gran consternación la noticia de la muerte de María. Al igual que en todo el mundo, los periódicos nacionales publicaron la información en primera plana. Las primeras manifestaciones de duelo ocurrieron en Barahona, donde aún vivía su madre, doña Teresa, y numerosos miembros de la familia Gracia Vidal.


Los ejecutivos del ayuntamiento de la ciudad sureña: Víctor Matos (Síndico), Sócrates Lagares (Presidente) y José A. Robert (Secretario), declararon duelo comunal por 24 horas, el 8 de septiembre de 1951, al otro día de la trágica desaparición de la destacada actriz barahonera. Diez días más tarde, dichas autoridades designaron la calle Prolongación de la Uruguay con el nombre de María Montez.



El Presidente Joaquín Balaguer oficialmente inauguró el aeropuerto internacional de Barahona el sábado 27 de abril de 1996 con el nombre de Aeropuerto Internacional María Montez.



En Santo Domingo, en mayo de 1998, pusieron una estrella de bronce en honor a María Montez en el Bulevar de la Juventud y de las Estrellas de la Avenida Winston Churchill.


En su testamento, María distribuyó su herencia, valorada en 200,000 dólares, entre su madre y algunos de sus hermanos, mientras el resto de sus bienes eran destinados a su hija y a su esposo.


La más transcendental herencia que dejó María a su muerte fue su gran hazaña de haber conquistado el estrellato a la edad de 28 años, y pese a que no venía de un pueblecito norteamericano como Ava, ni tenía la experiencia del Music Hall o de Broadway, simplemente venía de una provincia de la República Dominicana, donde pasó los primeros 27 años de su vida.


Su filmografía consta de 21 películas norteamericanas, 2 francesas y 3 italianas, que componen el significativo número de 26 películas, gracias a las cuales el nombre de República Dominicana figura en todas las enciclopedias e historias del Séptimo Arte que existen en la actualidad.


María escribió tres libros, numerosos poemas, entre ellas CREPUSCULO, la cual ganó el premio otorgado por la Asociación The Manuscriters, y un sinnúmero de artículos periodísticos escritos en cuatro idiomas. También escribió las canciones DOLIENTE y MIDNIGHT MEMORIES. FOREVER IS A LONG TIME, HOLLYWOOD WOLVES I HAVE TAMED y REUNION IN LILITH, son los títulos de los libros escritos por la actriz. A diferencia de los dos primeros, el último de dichos libros no llegó a ser publicado.


Todavía en República Dominicana sus miles de seguidores están a la espera de un museo dedicado a la actriz donde sus compatriotas puedan soñar con aquella mujer bellísima y exótica que, sin embargo, era tan nuestra.


Sus restos reposan en el Cimetiere du Montparnasse. Con las conmemoraciones del centenario de nacimiento el pueblo dominicano está a la espera que los restos de la actriz sean repatriados a su ciudad natal.




Tomado de:


Con información del libro MARIA MONTEZ: Su Vida, de Margarita Vicens de Morales.

EL TRÍO MATAMOROS Y EL CICLÓN

Cada vez que me acuerdo del ciclón se me enferma el corazón.
Por Frank Moya Pons

 El 16 de mayo del año 1930 los dominicanos fueron a las urnas para elegir a un nuevo Presidente de la República. Para ese entonces la campaña electoral ya estaba seriamente empañada por los ataques terroristas que los militares habían lanzado contra los candidatos demócratas de la llamada Alianza Nacional Progresista.


Estos candidatos civiles se vieron obligados a abandonar la contienda para escapar de la violencia y proteger sus vidas. Las elecciones se celebraron con la participación de un candidato único, el General Rafael Trujillo, Jefe del Ejército, quien en febrero de ese año había orquestado un golpe de Estado que obligó al depuesto presidente Horacio Vásquez a exiliarse en Puerto Rico. Sobra decir que la abstención electoral fue abrumadora, pero Trujillo "ganó" las elecciones con la casi totalidad de los votos emitidos.


El 16 de agosto de ese mismo año, Trujillo juró como nuevo Presidente de la República Dominicana ante un pueblo aterrorizado que observaba incrédulo como este advenedizo social de dudosas credenciales morales, originario de una familia de cuatreros, había ascendido rápidamente desde los rangos inferiores de la milicia a la primera magistratura de la Nación.


Trujillo tenía tan poca aceptación dentro del electorado que uno de los slogans más populares de la campaña era "no puede ser", pero sus bandas de delincuentes armados y las patrullas militares que aterrorizaban a los ciudadanos obligaron al retiro de sus opositores de las elecciones. Fue así como el Jefe del Ejército se convirtió en el Presidente del país y, para despejar el panorama de desconfianza nacional, inició su mandato con el tema "no hay peligro en seguirme".


Dos semanas después de Trujillo haber tomado posesión, el día 3 de septiembre de 1930, la ciudad de Santo Domingo fue azotada por uno de los huracanes más fuertes y destructivos de su historia. Entre los sobrevivientes de esta tormenta se encontraba un trío de músicos cubanos que habían llegado a Santo Domingo trece días antes de las elecciones para realizar una serie de presentaciones.



En aquellos años la República Dominicana mantenía frecuentes contactos e intercambios culturales con Cuba. Entonces la ciudad de La Habana era un centro artístico muy activo que irradiaba su influencia sobre todo el Caribe y México, y exportaba músicos y cantantes que difundían con éxito el son, un género más popular que las tradicionales danzas españolas o los danzones y danzonetes criollos.

A fines de la década de los años veinte, ni siquiera el bolero, que era entonces un incipiente género musical caribeño, podía competir con la popularidad del son cubano. En esos años, el son era una forma de expresión que había alcanzado la madurez, y sus orígenes podían rastrearse con facilidad hasta la segunda mitad del siglo 19.


El Trío Matamoros, el grupo musical cubano más famoso de esa época, llegó a Santo Domingo el 3 de mayo de 1930. La carrera artística de este grupo abarcó casi 50 años e hizo historia en el Caribe y América Latina, así como en las comunidades latinas de los Estados Unidos. En 1930 Los Matamoros eran ya famosos y recibieron una calurosa bienvenida en la República Dominicana, donde permanecieron por varios meses.
 


Nuestros tres músicos, Rafael Cueto, Siro Rodríguez y Miguel Matamoros hospedaron en el tercer piso de una residencia privada en un vecindario densamente poblado conocido como "Borojol", centro de la vida nocturna de la ciudad. El término "borojol" se deriva de la hispanización de Borough Hall. Los marines de los Estados Unidos, que ocuparon y gobernaron la República Dominicana de 1916 a 1924, popularizaron el nombre de este barrio.


Miguel Matamoros era el líder del Trío y él contó las experiencias vividas en el huracán en una entrevista publicada por el sociólogo Dagoberto Tejeda Ortiz en 1971 (Ver: Dagoberto Tejeda Ortiz, "El Ciclón y los Matamoros", Ultima Hora, Santo Domingo, 3 de octubre de 1998, p. 36.):


"En el año 1930 nosotros fuimos a Santo Domingo por primera vez; sí recuerdo que en esos días tomó posesión de la presidencia Rafael Leónidas Trujillo. Allí nos cogió eso, el ciclón San Zenón, dos días antes de la fecha que teníamos señalada para regresar a Cuba.


"Ese día del ciclón amaneció lloviendo muchísimo y había mucho viento y nadie se atrevía a salir a la calle; nosotros vivíamos en la casa de una amiga llamada Luz Saldaña. Entonces yo le digo a Siro y a Cueto: "Oigan, voy a salir", y por mucho que traté no pude hacerlo. El ciclón causó más de cuatro mil muertos y veinte mil heridos".


"El viento era tan fuerte que se llevaba las tejas del techo de la casa donde estábamos. Yo salí de la sala y me metí en la cocina, me escondí debajo del fogón de mampostería, de esos de tres o cuatro hornillas, llegó el momento en que yo creí que no hacía el cuento. El ciclón hizo mucho daño, y a mí me hizo mucho daño porque vi mucha gente muerta... Después que salimos de Santo Domingo yo compuse ese Son que se llama "El Trío y el Ciclón".
 


He aquí el texto de esa canción, según la grabación realizada poco después de los hechos:
 

En una tarde de inquietud

Quisqueya vióse de pronto de pavor sumida.

Reinaba allí la lluvia, la centella,

y la mar por doquiera embravecida.

Horas después quiso la aciaga suerte

sólo dejar desolación, gemido,

el imperio macabro de la muerte

sobre el pueblo entero destruido.

Cada vez que me acuerdo del ciclón

se me enferma el corazón.



Cada vez que me acuerdo del ciclón

se me enferma el corazón.


Cada vez que me acuerdo del ciclón

se me enferma el corazón.


Ayy, espiritistas inciertos

que muchos hay por allá...

Ayy, espiritistas inciertos,

que muchos hay por allá,

porfiaban con terquedad

que los del Trío habían muerto

Cada vez que me acuerdo del ciclón

se me enferma el corazón.


Cada vez que me acuerdo del ciclón

se me enferma el corazón.



Cada vez que me acuerdo del ciclón

se me enferma el corazón.

Ayy, esto fue lo más sabroso:

que el Trío en un aeroplano...

Esto fue lo más sabroso:

que el Trío en un aeroplano

volviera a suelo cubano

para seguir venturoso.


Cada vez que me acuerdo del ciclón

se me enferma el corazón.


Ayy, aquí termina la historia

de tan tremendo ciclón...


Aquí termina la historia

de tan tremendo ciclón:

los muertos van a la gloria

 y los vivos a bailar el son.


Cada vez que me acuerdo del ciclón

se me enferma el corazón.
 

Hoy es importante esta entrevista porque en un foro de aficionados a la música popular en el internet (www.groups.com /hobby /ptopic63979.html) alguien, citando la memoria oral de su madre, disemina la falsedad de que esta composición fue hecha por Miguel Matamoros para conmemorar un ciclón que pasó por Cuba en el año 1933. Sin embargo, un sitio más profesional de música popular (www.laconga.org/matamoros_cp.htm), que contiene una biografía musical de Miguel Matamoros establece claramente que "El Trío y el Ciclón" surgió de la experiencia en Santo Domingo: "Los Matamoros salieron a República Dominicana de donde trajeron nuevas composiciones, El Trío y el Ciclón y la célebre Lágrimas Negras, ambas fruto de experiencias reales". En la entrevista también queda claro el origen de "Lágrimas Negras" y de otro famosísimo son de los Matamoros, "Son de la Loma".


Sobre la primera de estas dos canciones Miguel Matamoros le contó a Tejeda Ortiz: "Lágrimas Negras. Sí, es un bolero-son, pero no lo compuse por un asunto mío, no señor, sino por una vecina que siempre llegaba a la casa lamentándose de que el marido, sin razón, la había dejado abandonada, por eso la poesía dice "Aunque tú me has dejado en el abandono, aunque tú has muerto todas mis ilusiones...". Sobre el segundo son la memoria de Miguel Matamoros es la siguiente: "Una noche en que yo estaba dando una serenata en Trocha y San Pedro, frente al sanatorio "La Colonia Española"... entonces de una casa cercana salió una señora con su hija, pequeñita ella, y me dice así: "Señor, señor, mi hija quiere conocer a los cantantes, quiere saber de dónde son". Entonces yo me inspiré en esa pregunta y esa misma noche hice el resto de la poesía. No, no señor, la gente no sabe lo que dice: Son de la loma, quiere decir, que son de Santiago; y cantan en llano quiere decir que cantan en La Habana".


El huracán que destruyó gran parte de Santo Domingo en 1930 fue llamado San Zenón a partir del miércoles 14 de septiembre, once días después del huracán y cuatro días después que el periódico reinició su publicación. Hasta entonces le llamaban indistintamente la tormenta, el ciclón, o el huracán del 3 de septiembre.


San Zenón pudo haber sido una más de las típicas grandes tormentas caribeñas de no haber sido por el rápido crecimiento que había experimentado la ciudad de Santo Domingo durante la década de 1920 debido a la migración acelerada de los campesinos que trataban de escapar de la pobreza. El censo municipal de 1919 registró apenas 26,812 habitantes en la ciudad, pero en 1935 la población había alcanzado la cifra de 116,992. Se estima que la población de la ciudad en el año de 1930 era cercana a 50,000 habitantes. Si las cifras oficiales de 4,000 muertos y 19,000 heridos son ciertas, entonces uno de cada dos habitantes de la ciudad sufrió heridas o murió a causa del huracán, haciendo de este fenómeno uno de los peores, sino el más letal en la historia del Caribe, hasta hoy.


El ciclón fue percibido como tal por los moradores de la ciudad así como por los funcionarios públicos que tuvieron que enfrentarlo. Cuando el periódico Listín Diario logró circular nuevamente el 10 de septiembre, una semana después del meteoro, el titular de primera página decía que "fue azotada la ciudad por un huracán de intensidad apocalíptica, el cual la redujo a escombros en pocas horas sembrando el exterminio". De acuerdo con esta fuente, el 70% de las casas de la ciudad quedaron totalmente destruidas y un primer estimado decía que el número de muertos ascendía a más de 3,000, en adición a más de 8,000 heridos.


En la entrevista concedida por Miguel Matamoros también se lee que "los muertos los cargaban al parquecito que actualmente está frente al fuerte de Santa Bárbara, en lo que era el centro de Borojol, frente al antiguo cabaret La Perrera y las cercanías del aristocrático (sic) Bombillo Rojo". Por otra parte, los muertos recogidos en la parte sur de la ciudad los amontonaban y los cremaban en la entonces llamada Plaza Colombina que luego recibió el nombre de Parque Infantil Ramfis y que hoy se conoce como Parque Eugenio María de Hostos, frente al obelisco de la Avenida George Washington.


Una noticia positiva fue que la antigua zona colonial soportó la tormenta bastante bien ya que la mayoría de las casas y edificios públicos estaban construidos en piedra o en mampostería, aunque muchos perdieron sus tejas y sus puertas, y muchas ventanas sufrieron daños.
 

Esta información no debería sorprendernos porque la parte colonial de Santo Domingo tenía más de 400 años de antigüedad y había enfrentado muchos huracanes anteriormente. La devastación, por tanto, tuvo lugar en los barrios nuevos creados por los inmigrantes recientes que invadieron la ciudad tras terminar los trabajos de las primeras carreteras que conectaban la capital con el interior del país. Estas carreteras comenzaron a ser construidas por el gobierno militar norteamericano entre 1917 y 1922, y continuaron durante el gobierno de Vásquez entre 1924 y 1930.
 

Antes de las carreteras, la capital de la República Dominicana parecía más una capital de provincia que una urbe de importancia, con menos de 70 manzanas urbanizadas encerradas dentro de sus antiguas murallas coloniales. Recuérdese que todavía en 1911 el pueblo de San Carlos y sus alrededores funcionaban como un municipio independiente de la ciudad de Santo Domingo, y la capital apenas había comenzado a extenderse tímidamente fuera de las murallas hacia el barrio conocido como "Ciudad Nueva", al oeste de los muros, y hacia la llamada Villa Francisca, al norte.

martes, 8 de mayo de 2012


HISTORIA DEL BEISBOL DOMINICANO





El béisbol fue introducido en el Caribe en 1866 por cubanos estudiantes en Estados Unidos en la entonces colonia española de Cuba. Ocho años más tarde, en 1874, el primer juego organizado de béisbol se jugó entre equipos cubanos.


Se dice que el primer cubano que trajo un bate a su patria fue Nemisio Guillo en 1864. Guillo aprendió a jugar en Mobile, Alabama, donde estudiaba, y después de él dos cubanos más fueron enviados a Mobile, incluido su hermano, Ernesto Guillo. Una vez regresaron a Cuba estos pioneros cubanos del deporte fundaron el Club de Béisbol de La Habana (Habana Base Ball Club), el primer equipo de béisbol del que se tenga conocimiento, no solo en Cuba, sino en toda América Latina.


Poco más tarde fue traído por primera vez a la República Dominicana por plantadores de azúcar cubanos que llegaron al país en la década de 1880, huyendo de la Guerra de los Diez Años en su isla natal, y construyeron los primeros molinos de azúcar mecanizados de la nación. Otros aseguran que el beisbol llegó a Quisqueya con los marineros cubanos y los primeros partidos se jugaron durante sus largas permanencias en los puertos dominicanos, en el siglo XIX.


Los plantadores de azúcar cubanos comenzaron suministrándoles equipamentos de béisbol a sus trabajadores como una distracción para mantener la moral. Gran parte de la fuerza laboral de la industria azucarera estaba compuesta por inmigrantes de las Indias Occidentales Británicas, y estaban familiarizados con el cricket. El 25 de septiembre de 1886 se celebró en San Pedro de Macorís el primer partido en el país entre los equipos cubanos "Santiago de Cuba" y "Angelina". Los principales propulsores fueron los cubanos Ignacio y Ubaldo Alomá. El primer torneo profesional dominicano se jugó en 1890 con dos equipos profesionales: Ozama y Nuevo Club. Se creó entonces la liga profesional de béisbol de la República Dominicana. Ambos equipos durante casi 3 décadas se disputarían la supremacía del beisbol en el país.




En el siglo XX se fundaron varios clubes de béisbol semiprofesional, el más notable fue el equipo de Santo Domingo los Tigres del Licey, fundado en 1907 y les fue quitando terreno a los equipos Ozama y Nuevo Club hasta hacerlos desaparecer. En 1910 en San Pedro de Macorís surgieron las Estrellas Orientales. No había rivales para el Licey en la pelota dominicana, lo cual originó un "parto provocado" al fundirse en uno solo tres de los equipos de la época, "San Carlos", "Los Muchachos" y el "Delco Lite" dando lugar, con peloteros "escogidos" de esos tres equipos, al nacimiento del equipo Leones del Escogido, cuya fundación oficial se remonta al 21 de febrero de 1921, es decir, catorce años después de haber sido fundado el equipo Licey.


En ese entonces el béisbol se jugaba en series cortas entre dos equipos. El béisbol produjo muchos equipos y clubes. Los Tigres del Licey y los Leones del Escogido desde entonces serán los dos equipos rivales que escribirán la parte más importante de la historia del béisbol en República Dominicana.
 

La ocupación de EE.UU. desde 1916 hasta 1924 dio lugar a nuevas incursiones. Como administradores militares proporcionaron dinero para formar y adquirir equipos para los clubes de aficionados y para la organización de partidos entre clubes dominicanos y clubes de marines de EE.UU. Para el final de la ocupación, el béisbol profesional asumió la forma y la estructura que mantiene hoy en día, con dos equipos en Santo Domingo, Tigres del Licey y Leones del Escogido; y uno en San Pedro de Macorís, La Romana, San Francisco de Macorís y Santiago de Los Caballeros.


El Generalísimo Rafael Trujillo llegó al poder en 1930 y rápidamente buscó consolidar el control sobre la economía nacional. Aunque no fue un fanático del béisbol como tal, sus familiares si fueron ávidos fanáticos del béisbol, y, tratando de reforzar su régimen, adquirió al Licey. Viene entonces una época interesante para el béisbol profesional en la isla. El país ya contaba con otra novena la Santiago B.B.C. con sede en Santiago de Los Caballeros.


En 1936, las Estrellas Orientales de San Pedro de Macorís derrotaron al Licey en el campeonato nacional. Ese año se enfrentaron al Santiago B.B.C., a los Tigres del Licey y a los Leones del Escogido. El torneo se llamó “Mayor Trujillo”, el trofeo se denominó Julia Molina en honor a la madre del dictador, y el torneo estaba dedicado su hermano José Arismendi Trujillo (Petán). El 28 de enero de 1937 La Santiago B.B.C. pasó a llamarse Las Águilas Cibaeñas.




En ese mismo 1937, como una jugada arbitraria para enfrentar a las Estrellas Orientales, Trujillo fusionó el Licey y el Escogido llamando Dragones de Ciudad Trujillo al nuevo equipo. Además, contrató los mejores jugadores de Cuba, República Dominicana, Puerto Rico, y Estados Unidos que su dinero pudo adquirir. Para contrarrestar esto, la novena de San Pedro de Macorís firmó a los cuatro mejores jugadores prospecto de Pittsburgh Crawfords: Satchel Paige, Josh Gibson, Sam Bankhead y Cool Papa Bell; todos procedentes de la Negro League, pero cuando llegaron al país, fueron detenidos por Trujillo y obligados a militar para los Dragones. Las Águilas Cibaeñas más tarde firmaron a varios jugadores cubanos de la Negro League, incluyendo al lanzador Luis Tiant (padre del lanzador del mismo nombre que jugó para los Medias Rojas de Boston) y el lanzador y jardinero Martín Dihigo. Los Dragones derrotaron a las Águilas y a las Estrellas, para ganar el campeonato de 1937, pero la enorme cantidad de dinero invertida para financiar la temporada, llevó a la bancarrota a los otros equipos, poniendo fin al béisbol profesional en la República Dominicana por un periodo de diez años.


Durante ese tiempo la atención se centró en los equipos amateur del país reunidos en el ejército dominicano como propiedad de Trujillo. La primera oleada de beisbolistas dominicanos en jugar profesionalmente en las Grandes Ligas, salieron del equipo amateur de Trujillo. Los primeros fueron Ozzie Virgil, los hermanos Alou: Felipe, Matty -ganó el título de bateo en 1966- y Jesús, y Juan Marichal, el primero en llegar al prestigioso Salón de la Fama.
 

Ozzie Virgil


Los hermanos Alou


El béisbol profesional se reanudó en 1951 con la primera alineación todavía vigente. En 1955, se construyó el Estadio Quisqueya en Santo Domingo, para ser compartido por los rivales Tigres de Licey y Leones de Escogido y en el siguiente año la Liga Dominicana de Base Ball Profesional, Inc., firmó un acuerdo con el Organized Baseball y se convirtió en una liga de invierno. La alineación de los cuatro equipos permaneció intacta por mucho tiempo.


Tras la inauguración del Estadio Francisco Michelli en 1979 en La Romana, se propuso la idea de crear un equipo que representara la ciudad, y ya para 1983 se materializa la idea y surgieron los Azucareros Béisbol Club, se pasaría a llamar más tarde Toros del Este en representación de La Romana.


Los Caimanes del Sur con sede en San Cristóbal se incorporaron a la liga junto a los Toros del este, en la primera expansión del circuito, ocurrida en 1983. Al poco tiempo de fundada, empezó a afrontar problemas económicos, sin embargo los esfuerzos fueron inútiles y el equipo tuvo que abandonar en la temporada 1986-1987. Retornaron en la siguiente temporada 1987-1988, pero los resultados financieros seguían siendo insatisfactorios. El equipo desapareció al final de la temporada 1988-1989. En sus 5 participaciones no lograron títulos.


En 1996 en San Francisco de Macorís surgieron los Gigantes del Nordeste, posteriormente con un nuevo dueño se les cambió el nombre en varias oportunidades, denominándose Pollos del Cibao, luego Pollos Nacionales y después Pollos Béisbol Club. En un nuevo cambio de propietarios retornó parcialmente a la denominación original, ahora se conocen como los Gigantes del Cibao.


Licey y Águilas han sido los equipos más exitosos en la Liga Dominicana de Invierno, son los que más han ganado campeonatos. Su rivalidad refleja la competencia que existe entre las principales ciudades de país; Santo Domingo, la capital, y Santiago, la ciudad más grande y capital no oficial de la parte norte del país.
 

Los Tigres del Licey han ganado 22 títulos nacionales, de los cuales sólo 20 son oficiales; y 10 Serie del Caribe. Los Leones del Escogido han ganado catorce títulos, siendo los más recientes en las temporadas 2009-2010 y 2011-2012, este último convirtiéndolos en los actuales campeones nacionales y posteriormente representaron a la República Dominicana en la Serie del Caribe ganando el campeonato. Las Águilas Cibaeñas han ganado 5 Series del Caribe y 20 títulos nacionales. Los Gigantes del Cibao, por su parte, no han ganado ningún campeonato, sus mejores actuaciones han sido las de las temporadas 2003-2004, 2008-2009 y 2009-2010 al conseguir el subcampeonato nacional. Las Estrellas Orientales han ganado 3 campeonatos: en 1936, 1954 y la temporada 1967-1968. Finalmente, los Toros del Este, quienes no habían ganado un título nacional desde su primera vez en 1994-1995, ganaron su último título en la temporada 2010-2011, además fueron subcampeones en la Serie del Caribe en San Juan de Puerto Rico en 1995.




Aportes de República Dominicana al béisbol


A nivel internacional, la República Dominicana es actualmente el país mayor exportador mundial de jugadores de béisbol. En cada temporada desde 1999, los dominicanos forman parte de al menos el 9% de los rosters activos de la Major League Baseball o MLB o Grandes Ligas, más que cualquier otra nación, excepto los Estados Unidos. Todos los equipos de as Grandes Ligas reclutan jugadores en la República Dominicana y aquí tienen sedes para reclutar jóvenes y prepararlos desde las divisiones inferiores de las Grandes Ligas. Muchos dominicanos han comenzado a jugar en las ligas de béisbol profesional de Japón, Venezuela, Puerto Rico, Colombia y México, las ligas de verano más grandes fuera de Estados Unidos y Canadá.
 

Desde Ozzie Virgil, el primer beisbolista dominicano en las Grandes Ligas en 1958 y poco después seguido por Felipe Alou y su hermano Matty Alou, otros jugadores notables han sido el inicialista Orlando Cepeda, el lanzador Juan Marichal, Tony Peña, George Bell y muchos otros. En Las Grandes Ligas de hoy, hay cientos de peloteros Dominicanos. Los más notable son Pedro Martínez, quien ganó el "Cy Young" en 1997, el jardinero Manny Ramírez, el lanzador Pedro Martínez, y los hermanos Alou y por supuesto Sammy Sosa, quien alcanzó el récord de jonrones durante la temporada de 1998 y gano el título de Jugador más Valioso, y el primera base Albert Pujols, ganador del premio al Jugador más Valioso de la Liga Nacional en tres ocasiones, ganador en dos oportunidades del Hank Aaron Award de la Liga Nacional, y dos anillos de Serie Mundial en 2006 y 2011.


En la temporada 2011-2012, 241 dominicanos jugaban en las Grandes Ligas. Hay que destacar que los cinco peloteros criollos que han llegado más lejos en cuanto a récords y actuaciones, son Juan Marichal, Pedro Martínez, Samuel Sosa, Albert Pujols y Tetelo Vargas. Sin tomar en cuenta a Alex Rodríguez, convertido en un súper jugador.




Sin embargo, el éxito de la Selección nacional de béisbol de la República Dominicana nunca ha coincidido con la producción de talentos de béisbol que tiene el país. República Dominicana fue campeón mundial en 1948, subtitular en 1942, 1950 y 1952, y medallista de bronce en 1943, 1953 y 1969. Terminaron terceros en la Copa Intercontinental de 1981, segundos en los Panamericanos de 1979, al tiempo que ganaban a escala regional en 1962 y 1982, siendo plata en 1946, 1970 y 1974, y bronce en 1954 y 1990.


Seis han sido las Series Profesionales del Caribe que han celebrado, además de ser locales en el mundial de 1969, y en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en 1974 y 1986.


Si bien es cierto que no están en la élite mundial, según los resultados en los torneos oficiales organizados por la Federación Internacional donde se ven privados de contar con sus estrellas que participan en Estados Unidos, la calidad del béisbol dominicano sigue aumentando progresivamente para convertirlo de manera general, en uno de los más fuertes del mundo.


Los mejores de cada época


El comentarista deportivo Cuqui Córdova en el año 2007 estableció el listado de los mejores beisbolistas dominicanos en cada época. Un cuidadoso ejercicio que puede llevar a diferentes conclusiones y polémicas, agrupó en cada período de años los que consideró fueron los que más se distinguieron.


En cada época han surgido jugadores de primera magnitud, excelentes lanzadores, bateadores contundentes y players defensivos.


Aquí presentamos los equipos de estrellas de dominicanos en las diferentes épocas según el criterio de Córdova:
 

EQUIPO DE ESTRELLAS DE LOS AÑOS 20 Y 30

Rafael-Guaguá-Vargas C.

José Antonio Benítez (Bobó) C.

Rafael-Fellito-Guerra P.

Enrique Hernández (El Indio Bravo) P.

Pedro Alejandro San P.

Baldomero-Mero-Ureña P.

Gustavo Lluberes P.

Rafael Emilio Gómez (Sijo) P.

Ramón Emilio Durán (Negro) P.

Joaquín Suncar P.

Ernesto-Nestico-Sánchez P.

Francisco-Ninín-Rodríguez 1B.

Juan Delfino García (Bragañita) 2B

Pedro Antonio Báez (Grillo A) 3B

Horacio Martínez SS.

Juan Esteban Vargas (Tetelo) OF.

Rafael Amable Alvarado (Sonlly) OF.

Fernando-Pindú-Miranda OF.

Luis Ernesto Rodríguez (Burrulote). Utility.

Mateo de la Rosa. Utility.


EQUIPO DE ESTRELLAS DE LOS AÑOS 40

Enrique Lantigua (El Mariscal) C.

Luis Saint Claire (Guiguí Lucas) C.

Ventura-Loro-Escalante P.

Andrés Julio Báez (Grillo B) P.

Luis Castro (Niño el Zurdo) P.

Diómedes Antonio Olivo (Guayubín) P.

Manuel Cáceres Mora (Manolete) P.

José Dolores Pérez (Loló) P.

José Saint Claire (Pepe Lucas) 1B.

Aquiles Martínez 2B.

Rafael Valdez 3B.

Rafael A. Vargas (Papito) SS.

Luis Arturo Báez (Grillo C) OF.

Ramón Eligio Vargas (Tetelito) OF.

Alcibíades Colón OF.

Pedro Nina Utility


EQUIPO DE ESTRELLAS DE LOS AÑOS 50, 60, 70 Y 80

Tony Peña C.

Federico A. Velásquez C.

Juan Marichal P.

Joaquín Andujar P.

Mario Melvin Soto P.

Federico-Chichí-Olivo P.

Pedro Borbón P.

Danilo Rivas P.

Arturo Peña P.

Juan Andrés Guzmán P.

Alejandro Peña P.

José De León P.

Rafael-El Gallo-Batista 1B.

Julián Javier 2B.

Chilote Llenas 3B.

Tony Fernández SS.

Pedro González IF.

Dámaso García IF.

Osvaldo Virgil IF.

César Cedeño OF.

Cesarín Gerónimo OF.

Felipe Rojas Alou OF.

Mateo Rojas Alou OF.

Jesús Rojas Alou OF.

Manuel Mota OF.

Pedro Guerrero OF.

Rico Carty OF.

Jorge Bell OF.

Stanley Javier OF.

Manuel Emilio Jiménez OF.

Miguel Diloné OF.

Luis María Muñoz (Gallego) Utility.


EQUIPO DE ESTRELLAS DE LOS AÑOS 90 Y 2000

Miguel Olivo C.

Alberto Castillo C.

Pedro Martínez P.

Ramón Martínez P.

Bartolo Colón P.

José Rijo P.

Pedro Julio Astacio P.

José Mesa P.

Francisco Cordero P.

Alberto Pujols 1B.

Plácido Polanco 2B.

Robinson Canó 2B.

Luis Castillo 2B.

Alex Rodríguez 3B.

Adrian Beltré 3B.

Aramis Ramírez 3B.

Miguel Tejada SS.

Julio César Franco IF.

Manny Ramírez OF.

Sammy Sosa OF.

Vladimir Guerrero OF.

Alfonso Soriano OF.

Moisés Alou OF.

Luis Polonia OF.

José Guillén OF.

David Ortiz BD.






Fuentes